Los estudiantes eligieron a los
integrantes de sus centros de estudiantes y a ocho consejeros, que junto
a otros diez representantes del cuerpo docente, uno no docente, y otro graduado constituyen el consejo directivo de cada facultad, que es
encabezado por el decano. En este espacio se tratan los planes de
estudio, los reglamentos de cursado y evaluación y la conformación de
los calendarios académicos, entre otras cosas.
Cabe destacar que en este mes habrá nuevos decanos y a mitad de año
un nuevo rector, que sustituirá al nefasto Darío Maiorana por un período de
cuatro años.
El Movimiento Nacional Reformista se quedó con las facultades de
Bioquímicas, Ciencias Económicas, mientras que Área ganó en
Arquitectura, 15 de Junio en Ciencias Exactas, Ingeniería y
Agrimensura, y DNI en Derecho.
Por su parte, la Franja Morada se impuso (es muy lamentable) en Ciencia Política y
la agrupación Mate Cocido en Humanidades. La izquierda ganó en la facultad de Psicología y el Alde en Ciencias
Médicas.
En tanto, la facultad de Ciencias Agrarias quedó en manos de una
agrupación de estudiantes independientes, y Ciencias Veterinarias en
Unidad Veterinaria. Además, Gio conquistó la facultad de Odontología.
La estrepitosa
y saludable caída de la agrupación oficialista (Franja Morada) marca el camino
que los docentes deberían seguir, esto es, optar por la calidad de la educación
universitaria para revertir el proceso que, mediante el clientelismo político y
las prácticas mafiosas para con quienes no son sus cómplices, desde hace 8 años,
está destruyendo una institución que, otrora, tuvo un alto prestigio.